La salvación del Real Zaragoza estaba hasta ayer a 10 victorias.
Ayer, en Tenerife empezó la cuenta atrás, dejando la cuenta a falta de 9 victorias.
Todavía nos encontramos en puestos de descenso (18º.)pero parece haberse encontrado las emociones y sentimientos de equipo por lo que se pudo ver sobre el césped del Heliodoro Rodríguez al finalizar el partido... "buenas sensaciones".
El Tenerife intentó jugar al fútbol, salvo el hermano de Xabi Alonso que parece buscar ser reconocido por "deméritos propios" y salvo el planchazo de Alfaro a Carrizo y las patadas y pisotones que recibió Ander Herrera a pesar de estar el juego detenido, lo que evidencia que todavía no se ha adaptado a la categoría, buscando su identidad en el juego de ataque y con excesiva marrullería en los contactos, buscando el calor de su público que sólo ve falta en toda acción del contrario aunque no contravenga lo que estipula el Reglamento.
Tras el 1-0 el "mazazo" psicológico volvió a afectar a los jugadores zaragocistas y parecía que "la vida iba a seguir igual", pero una revolución en el caos, volcándose en ataque con Arizmendi, Lafita, Colunga, Suazo, Pennant y se echaba en falta una posición más adelantada de Ander Herrera.
La tarjeta de Diogo, el fallido experimento de Ponzio en banda y la carencia de laterales de confianza (Paredes parece que tampoco está en una forma que convenza a Gay ni ha estado afortunado cuando ha sido alineado), alientan a jugar con tres centrales : Pulido, Jarosik y Contini y buscar más potencia y llegada en el centro del campo : Gabi, Ander Herrera, Lafita, Pennant y Colunga; con el objetivo de alimentar a dos delanteros con movilidad: Arizmendi (que provocó un decisivo penalty) y Suazo (que lo marcó para callar las bocas que se "cebaron" en su apariencia física).
Hubo mejoría y resultado, pero es el primer paso de una escalera muy grande, como comentó Gay en la rueda de prensa post partido.
La llegada de Edmilson para ocupar el puesto del mediocentro que Gay lleva tiempo reclamando como pieza importante en el Real Zaragoza que anda buscando. Sólo queda aclarar la posición del lateral izquierdo o instaurar los tres centrales pidiendo un mayor sacrificio a los medios laterales, que pierden la condición de interior en función de la reducción del número de diagonales que llegan a realizar a lo largo de cada partido.
Mención aparte merecen la dirección deportiva, la secretaría técnica y la dirección general (Prieto, Herrera y Poschner) que tienen que trabajar a destajo para subsanar las carencias de una plantilla "cuadrada a martillazos" por las desavenencias, primero bajo sospecha y finalmente hechas públicas entre la dirección del Real Zaragoza y Marcelino. El mercado invernal cuya oferta es inferior a la veraniega y, encima si se acude con la cartera casi vacía, obliga a extremar las precauciones en busca de la "ganga" e intentando evitar hacer el "primo". El tiempo dirá si trabajar de esta manera tiene premio, o si la osadía de prevalecer los egos sobre la entidad del Real Zaragoza se paga muy, muy caro.
Empieza la cuenta atrás: ¡Diez!....
No hay comentarios:
Publicar un comentario