¡¡ A GANAR !!

¡¡ A GANAR !!

No queda otra. Ha llegado la hora de la verdad, cuando el campeonato alcanza su último tercio y no cabe ya ningún tropiezo, los jugadores quieren transmitir a la afición la confianza que el "último batacazo" ante el Hércules y las lesiones habían disipado tras inflar el globo hasta reventar después del partido ante el Murcia.

Los reiterados errores en la zona defensiva, provenientes de la falta de fuerza del centro del campo, más por escasez de efectivos adecuados a la ingrata labor de presionar para recuperar el balón e impedir la libre circulación del contrario, que por carencia de físico e inteligencia.

Cuatro defensas atrás para el poco trabajo efectivo que tienen que desarrollar durante el partido: se aburren. Cuando se aburren intentan inventar, se salen de su posición, estorban la labor de sus compañeros, a los que intentan ayudar y, quedando fuera de posición suelen correr tras los contrarios sin alcanzarlos, en lugar de salir a su encuentro y arrebatarles el balón.

Con jugadores de banda, apenas la jugamos por allí. Los laterales no se atreven a subir, bien por falta de cobertura de medios y centrales, o bien por tener que estar pendientes de que los centrales puedan salir con seguridad y adelanten líneas con solvencia y garantías, y tener que aproximar sus posiciones al centro de la defensa para poder jugar el balón o apoyar su salida, en lugar de propiciar jugadas por la banda con el interior que le precede sobre el terreno.

No existe una columna vertebral propiamente dicha en el equipo en su disposición sobre el campo. Portero-defensa central-mediocentro-mediapunta-delantero centro, quedando otras seis posiciones que cubrir en función de las instrucciones tácticas del entrenador. Lo que impide la jerarquía, la toma de decisiones, la genial improvisación y el orden táctico del que partir para recomponer el dibujo del equipo para dominar la situación y tomar el mando del partido.

El juego desarrollado en Murcia parecía haber desempolvado el manual del viejo entrenador: hacer fácil lo que se tiene que hacer y no complicarse la vida haciendo lo que no se debe.Una complicación tonta, y gol del Murcia.

Los centrales están bajo sospecha, perseguidos por la atenta mirada de los aficionados que quieren ver el desarrollo de las facultades que atesoran tan reputados futbolistas. Un chico de la casa les sacó los colores durante unos partidos. No es que fuera una superestrella (que todo llegará) pero no se complicaba la vida y eso le daba la confianza suficiente para plantarse ante los contrarios y salir con bien de los envites.

Esperemos que los veteranos y expertos jugadores se "hayan puesto las pilas", al más puro estilo D.P. (Darren Philip, pivot del CAI de baloncesto) y la alegría vuelva a sus caras a través del buen juego realizado. Primero efectivo y más tarde, si se puede, vistoso.

Si al finalizar el partido de Vitoria, los fantasmas de la temporada siguen "pululando", será el momento de recolectar nuevos frutos del árbol de la cantera.(¡Qué cara de disfrutar con las preguntas de la afición se le podía ver a Goni en "Heraldo de Aragón" (por internet)!).

El sábado a las 18.30 empezaremos a tener más pistas sobre como evoluciona la situación. Esperemos que "el enfermo se recupere" y comience a hacer "vida normal".

manolomel